Durante los últimos años, desde el año 2016, he tenido la oportunidad de ascender a diversas montañas para fotografiar la influencia de la contaminación lumínica sobre el medio ambiente nocturno. Esta experiencia me ha permitido conocer la geografía ibérica e incluso lugares como Canarias o Los Andes argentinos. Llegado este momento, entre Adrián Carrera y el que suscribe hemos diseñado un logotipo identificativo para así dar a conocer el Atlas Ibérico de la Contaminación Lumínica, el cual va casi por la mitad de los lugares previstos ya sondeados, espero que antes del 2025, esté concluido y así aportar un seguimiento que nos permita valorar si en el futuro habremos aumentado o diminuido la contaminación lumínica en un momento en que tanto se habla de calentamiento global planetario.
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